lunes, 3 de marzo de 2008

Espera

Observaba lentamente como sus uñas se alargaban, no las veía, pues la oscuridad era absoluta, pero lo notaba, al igual que notaba que su pelo cano no paraba de crecer, despacito, muy de poco en poco, pero crecía, y ella lo notaba, tenía paciencia, toda la del mundo, tenía tiempo, para notar, para sentir, sentía como los cosquilleos recorrían su cuerpo, como pequeños bocados, tenía la sensación de ser devorada, tenuemente, sutilmente, pero ella era incapaz de moverse, no tenía a donde ir, además le gustaba sentirse consumida, le hacía la espera más llevadera, y, aunque de vez en cuando soñara con ver de nuevo la luz, correr de nuevo entre las flores, sentir la brisa de otoño en su piel desnuda, sabía que su sitio era ese.

Aunque ya no se sentía bella, eso no importaba, sabía que a el no le importaría verla así, pues aún conservaba toda la belleza de su corazón, que era de la que el se enamoró, aún conservaba todas sus palabras, todas sus miradas, todos sus besos, todos sus gestos, toda su alegría...

Esperaba y esperaba, en la oscuridad, donde el aire hacía tiempo que desapareció, donde las astillas caían de las paredes y el techo, donde no mirar, no más al vacío, donde no notar, no más su transformación en piel crujiente, donde no oler, no más el aroma de su inexistencia, donde no oír, no más el eco de sus recuerdos, donde no saborear, no más su espera, donde los sentidos no tenían sentido.

Aunque no lo veía, empezaba a notar su presencia, estaba cerca, cada vez mas cerca, los nervios empezaron a pulular como idos en el patio de recreo, había tenido años, y nunca decidió que decir cuando llegara el momento de su reencuentro.

La tapa de su ataúd se abrió.

Cayó sobre ella, con todo su peso, con sus ojos sobre sus cuencas, con sus labios sobre sus dientes, con su pecho contra sus costillas...

-Hola.
-Hola.
-Eres hueso.
-Lo sé,... tu eres piel marchita.
-Ya,... ¿que has hecho todo este tiempo?.
-Esperar.
-¿El que?.
-A ti.
-¿Tanto me querías?.
-Tanto te quiero,...¿y tu, que has hecho?.
-Esperar.
-¿El que?.
-Mi muerte.
-¿Y eso?.
-Quería volver a conocerte.
-¿Tanto me querías?.
-Tanto te quiero.

3 comentarios:

OscaR J. dijo...

consejo del día;
espera, no desesperes.

Rocio dijo...

Me has vuelto a emocionar







So MUCH I love YOU

Anónimo dijo...

Pues va a ser que ayer no era que taba fumá, otra vez la he leído, y otra vez me ha vuelto a emocionar. En dos: palabras IM - PREZIONANTE. Bstos